Ajo negro: la novedosa producción de una empresa cordobesa

Garlic es la primera productora de ajo negro de la provincia de Córdoba. Por la demanda del sector gastronómico, cada vez más adepto a las delicatessen y a las combinaciones gourmet, proyecta aumentar su producción y trasladar su planta para poder generar mayor cantidad del producto.

Enrique Barra es un ingeniero en alimentos que hace algunos años a Chile, donde conoció el ajo negro y lo tomó como un novedoso producto para instalar en el sector de la gastronomía cordobesa. Años después creó en la ciudad Río Segundo, distante a 60 kilómetros de Córdoba, la firma Garlic.

Con el tiempo, a partir del novedoso emprendimiento, logró instalar el producto, generar demanda y aumentar su producción, lo que llevó a tener que mudar sus instalaciones en cercanías de la Autopista Córdoba- Rosario.

El ajo negro es un innovador producto de variadas aplicaciones terapéuticas y gourmet, que Barra conoció por “casualidad” en las góndolas de un supermercado del país transandino.

Cinco años después, tras arduos trabajos de investigación y de especializarse en la materia, la empresa produce tres toneladas de ajo negro mensuales.

“Enviamos nuestra producción a Corrientes, Entre Ríos, Santa Fe, Buenos Aires, Mendoza, Santiago del Estero, Salta, Neuquén, Río Negro y a Santa Cruz”, detalló el joven emprendedor cordobés sobre la comercialización del producto en el país.

Mientras que, en la provincia de Córdoba, Garlic comercializa a través de 15 distribuidoras que llevan ajo negro a supermercados, vinotecas y almacenes naturales.

La empresa proyecta aumentar su producción y comercializar en el exterior luego de instalarse en el nuevo predio. “Vamos a producir seis toneladas de ajo negro por mes para, además de vender en Argentina, exportar a Brasil, que es el principal país consumidor de ajo, y sus variedades, a nivel mundial”, indicó Enrique.